Te miro como mira un niño pequeño
Olvido el sentido de la distancia
con el eco que deja el sonido de tu risa.
Bailo con tu corazón,
que no es el mío,
pero lo cuido como tal.
No sabría decirte qué parte de mí me da más miedo perder,
mis piernas,
mis ojos,
mis manos,
o a ti.
Y menos aun sabría pedirte
que el estar a tu lado no termine jamás.
Así que, no sé,
como excusa te pediré un abrazo.
Y, por cierto,
no dejes de abrazarme.
Yo esque... no puedo contigo, haces cada cosa!
ResponderEliminarMe ha encantado de principio a fin!